Los problemas cardiovasculares afectan a millones de personas. La diabetes, el colesterol alto o la placa aterosclerótica son problemas que pueden ocasionar verdaderas complicaciones a quien las padece.
No obstante una de las afecciones más comunes es la hipertensión. Bajar la tensión arterial es una preocupación muy extendida, y existen diferentes maneras de conseguirlo. En este artículo se explica todo lo que hay que saber al respecto.
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Bajar la tensión arterial: 10 maneras de conseguirlo
Las personas que sufren hipertensión pueden recurrir a diferentes consejos. Bajar la tensión arterial no es fácil de buenas a primeras, pero existen maneras de conseguirlo a medio y largo plazo.
Se trata de diferentes pautas que hay que incorporar como parte de nuestra vida. Asentar buenos hábitos es fundamental para luchar contra este problema de salud, si bien tal vez evitar los malos hábitos es aún más importante.
1. Evitar comer productos alimentarios procesados
Para bajar la tensión arterial es muy importante evitar consumir productos procesados. La industria alimentaria llega a producir gran variedad de productos alimentarios tales como galletas, salsas, cereales, bollos, cremas, etc.
Estos productos acostumbras a estar compuestos por muchos ingredientes poco saludables, tales como aceite de palma, azúcar o harina refinada.
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2. Comer alimentos reales
Los alimentos de verdad son los que garantizan un óptimo estado. Obviamente esto va más allá de el hecho de sufrir hipertensión, y gracias a esta simple pauta se pueden evitar muchos problemas de salud.
Por alimentos reales se conocen verduras, frutas, legumbres, carne, pescado, frutos secos, semillas, etc. La mayoría de productos procesados no son saludable (a excepción de algunos como el aceite de oliva), y lo recomendable es no comer nada que contenga más de 4 ingredientes.
3. Comer sin sal
La sal también es otro de los ingredientes comunes en los productos alimentarios. Se encuentra en muchos de ellos, pero también hay tener cuidado a la hora de no añadir sal a la comida que se prepara en casa.
La sal es muy problemática para las personas que tienen hipertensión. Además, consumir sal de forma habitual hace que bajar la tensión arterial se un objetivo casi imposible.
4. No fumar
El humo del tabaco es muy perjudicial para quienes tienen hipertensión. Fumar hace que aumenten las catecolaminas, unas sustancias que reducen el diámetro de los vasos sanguíneos porque causan vasoconstricción.
Si se deja el tabaco es mucho más fácil poder controlar y bajar la tensión arterial, si bien hacerlo demasiado tarde puede resultar más complicado para conseguirlo. Dejar el tabaco es una de las mejores decisiones que se pueden tomar para la salud.
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5. Hacer ejercicio
Hacer ejercicio es muy positivo para la salud. Son muchas las personas que tratan de aplicar los puntos anteriores pero que ignoran todo lo que el ejercicio físico puede aportar para cuidar el cuerpo.
Solamente media hora de andar o ejercicio leve durante 3 veces a la semana es todo un éxito para muchas personas y su salud. No es necesario tener que sudar y sacrificarse mucho, un poco de ejercicio es suficiente para sentirse mejor y cuidarse.
6. No tomar café
Muchas personas no caen en la cuenta de que el café impide bajar la tensión arterial. Esta bebida hace que los vasos sanguíneos se contraigan, o más bien dicho, impiden que algunas sustancias encargadas de abrirlos puedan realizar su función.
Tomar un café el día puede ser aceptable en algunos casos, pero hay que tener en cuenta que tomar más de uno o saltarse todos los consejos de este artículo puede ser muy contraproducente.
7. Meditar
Se ha comprobado científicamente que la meditación ayuda a bajar la tensión arterial. Muchas veces la causa de tener hipertensión es sufrir ansiedad y estrés, y la meditación es muy eficaz para combatirlos.
Esta práctica milenaria permite que los pensamientos fluyan, evitando obsesionarse y somatizar. También es muy recomendable el Hatha yoga, una actividad que se encarga de trabajar tanto el cuerpo como la mente.
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8. Comer ligero
Las comidas copiosas pueden afectar la tensión arterial. Cocinar de forma sencilla y ligera, en cambio, permite que el cuerpo pueda digerir mejor los alimentos, con lo que le exigimos menos.
Así, evitar guisados, cocidos o fritos es también muy importante para controlar la salud cardiovascular. Para ayudar al cuerpo a bajar la tensión arterial es mucho mejor comer alimentos hervidos, al vapor o a la plancha.
9. Regular la ingesta de grasa
Las grasas son nutrientes muy importantes para el cuerpo, pero hay que controlar su consumo. Hay personas que presentan una alta proporción de grasas en la sangre, por lo que el índice aterogénico puede ser elevado.
Esto significa que el colesterol HDL y los triglicéridos pueden pegarse en las paredes de los vasos sanguíneos y generar placa aterosclerótica. Además, hay que evitar tajantemente las grasas trans, producto de los procesos de elaboración de la industria alimentaria.
10. Controlar la medicación
Algunos medicamentos puede subir la tensión. Se trata de uno de los efectos secundarios que pueden llegar a ocasionar algunos fármacos, por lo que es pertinente leer el prospecto en caso de estar tomando medicación.
De todos modos que la tensión arterial suba un poco puede ser preferible a un problema mayor. Algunos fármacos actúan de forma muy eficaz contra dolencias serias, por lo que en algunos casos este efecto secundario debería percibirse como menos relevante.
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Referencias bibliográficas
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